Toda vida física y mental es una manifestación de energía.
Movilizar las propias energías del consultante e integrarlas
en una totalidad funcional es la finalidad última de la Astrología.
Cada elemento (agua, tierra, aire, fuego) representa un
género básico de energía y conciencia.
Cada uno de los cuatro elementos se manifiesta en tres modalidades
vibracionales (cardinal, fija y mutable).
Son los cuatro elementos por las tres modalidades las que generan las doce
pautas primarias de energía. Las doce
pautas primarias de energía configuran los doce signos zodiacales que componen una carta natal, con las diferentes combinaciones en cada una
de ellas.
La posición del Sol, la Luna y los ocho
planetas conocidos dentro de cada carta natal en los diferentes signos, así
como las relaciones entre ellos, nos muestran las particularidades básicas de la
personalidad y el temperamento de cada persona, sus dones y sus
posibilidades a desarrollar y las
dificultades que pueden concretarse en la vida de la persona.
Es a través de esta base de personalidad y
temperamento que la persona recibe al momento de nacer y del aprendizaje que recibe y realiza en función de lo que ha vivido
desde su nacimiento, que actúa en concreto en lo que vive, en el aquí y ahora. O sea, todo esto constituye el tipo de
observador que cada uno es.
El coaching (en el cual profundizamos en la entrada que lleva este nombre) es un proceso de aprendizaje a través del cual transformamos el tipo
de observador que somos como resultado de las interpretaciones de las distintas experiencias que hemos
vivido.

El coach debe ayudar a re-articular las creencias limitadoras
del consultante sin presionar, ni formular interpretaciones, con empatía e
intuición, con una escucha noble, activa y reflexiva, y con maestría
en la formulación de preguntas.
Sabemos ya que toda acción resulta del tipo de observador que cada uno es. Observador es la forma particular en que un individuo otorga
sentido a la situación que enfrenta, antes de intervenir en ella.
En consecuencia, al transformar al
observador, construimos nuevos y diferentes sentidos, que transformarán también
nuestras acciones.
De aquí, el concepto
de transformación personal del coaching astrológico.
2 comentarios:
Muy interesante!!
Muy bien enfocados los temas y muy claros. Me gusta mucho. Y como asesora familiar he utilizado no solo los conceptos jungianos sino tambien los signos o sea los soles delas personas para poder tratarlas lomejor posible. Gracias!
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